Partido en el que las jugadoras del San Lorenzo se mostraron poco coordinadas y la falta de intensidad desde el minuto uno dificultó su meta, favoreciendo así a la ofensiva del Andiamo A, que supo aprovechar muy bien los errores de las locales para hacerse con la victoria.

Los primeros compases del encuentro se vivieron con mucha calma. Ambos equipos se disputaban el balón, aunque con un nivel muy bajo de intensidad. A pesar de las circunstancias, el San Lorenzo consiguió hacerse con la posesión del balón y llevaron a cabo varias finalizaciones que no alcanzaron su objetivo. 

Tras varias jugadas sin éxito, las locales consiguieron forzar un córner por la izquierda que Gala se encargó de sacar y que, tras un pase en corto, Laia abrió el marco el marcador, 1-0. Este tanto puso en alerta al Andiamo A que enseguida subió la intensidad y la fuerza en la presión, dificultando la tarea del equipo rival, pero sin llegar a hacerse con la posesión.

El partido siguió su curso y las visitantes encontraron el camino al gol a causa de una mala comunicación entre una de las defensas locales y la portera. La duda entre ambas, facilitó la toma de decisión de la contrincante y se penalizó al equipo con el gol, 1-1. Más tarde, a falta de un minuto para el ecuador del partido, las jugadoras visitantes forzaron un saque de banda que remataron al palo corto y tras tocarlo la portera entró en puerta, 1-2.

Tras el paso por los vestuarios, las azulblancas se vieron presionadas por el resultado en el luminoso, pero se concentraron y empezaron a combinar el balón para ir ganándole territorio a las rivales. Las jugadas aparecían, pero las finalizaciones fueron poco precisas y las defensas lucharon con bravura para mantener la ventaja en el marcador.

El calor era abrasador así que se llevó a cabo un parón para hidratarse. Después del pequeño descanso, las jugadoras locales salieron con mucha fuerza, pero no lograron acabar con la sequía de goles en el marcador. Los balones aéreos cruzaban el campo de una portería a otra sin dar paso a la combinación entre jugadoras y rompiendo el ritmo de juego.

Los últimos compases del encuentro fueron los más intensos. Las locales se vieron con el agua al cuello y aumentaron con fuerza su intensidad intentando alcanzar la portería contraria sin descanso. El esfuerzo fue grande pero el cuero no entró, la suerte no estaba de su parte. En cambio, las visitantes supieron aprovechar una contra que con un disparo pegado al palo anotaron el último tanto del partido, 1-3.